El Canals de Bagaría
15/5/2006 |
Un año más, el concurso Maria Canals, que ha llegado a su 52.ª edición, ha demostrado que es exigente con sus concurrentes, 113 este año. Realizar la crítica de los tres concursantes que llegaron a la final es una tarea harto difícil, por no decir ilícita, habida cuenta de su verdadera excepcionalidad: Mi Yeon (Nueva Zelanda), Marie Vermeulin (Francia) y José Enrique Bagaría Villazán (España). (Fue Bagaría quien finalmente se alzó con el premio, dotado con 9.000 euros, siendo el primer catalán que lo consigue en cuarenta años).
La pianista neozelandesa, algo agarrotada en el fraseo del movimiento inicial del Cuarto concierto de Beethoven (fue tercera), resolvió de modo encomiable la cadencia final de éste antes de dar paso a los dos restantes movimientos. Se percibió buen material en una artista muy joven (23 años) y que dará que hablar. Gustó mucho una pianista un año más joven, Marie Vermeulin (segunda clasificada), cuya lectura del Concierto en sol de Ravel tuvo la sensualidad requerida y, sobre todo, la elegancia neoclásica inherente a la partitura, excelentemente servida por su intérprete y, como en la pieza anterior, pulcramente acompañada por la Orquestra Simfònica del Vallès, dirigida por una batuta (la de Salvador Brotons) de las que ayudan y con la que uno puede sentirse seguro.
El pianista español Bagaría Villazán puso el broche de oro a la mañana del domingo con una página descomunal como el Primer concierto de Liszt, cuya fogosidad parece acorde al espíritu (que se nos antoja muy simpático) de ese joven de 27 años. Lástima que nos distraímos algo por culpa de una señora sentada en primera fila de platea, a la que le sonó el móvil durante un rato largo.
Dejando a un lado el orden de los premiados, el nivelazo del concurso barcelonés vuelve a marcar un hito en el mundo de los certámenes pianísticos de nivel y proyección internacionales. Por todo lo dicho, podríamos concluir que el concurso Maria Canals ha sido, a fin de cuentas, ganador de sí mismo.
JAUME RADIGALES
La Vanguardia